LEYENDA

Posted by Walterio | Posted in , , , , | Posted on 6/27/2008 12:00:00 a. m.

5

.

La tinta comienza a tornarse invisible, pero aún alcanzo a leer:


Alta Gracia Enero 11 de 1926,


Querido Jorgito aquí tienes el tajamar de Alta(G)r(ac)ia, paseo aristocrático frente al Sierras tendrá una extensión de cuatro cuadras y 10 mts de profundidad. Fue construido por los jesuitas hace 3 siglos y estaba unido a la ciudad de Córdoba por un subterráneo que ha desaparecido encontrándose tan solo a 2 cuadras del camino de Córdoba unos grandes fosos que se presumen pertenezcan o provengan de aquel subterráneo. Queda a 2 cuadras de “San Jorge” frente a la casa que ocupó el virrey Liniers. Te besa Mecha.

Dile a la Negra me mande la dirección de M. E. Imaz. No traje la mantilla ¿vieron?


Palabras y perfiles se desdibujan, la memoria se disuelve, las pistas se pierden… Unos años atrás y poco antes de morir, Don Justo Torres bajo los arcos centenarios de la estancia me mostró fotos de vestigios desperdigados por las sierras circundantes: muros desconocidos, calicantos con el mismo patrón constructivo que los que se decoloran en las postales asombradas por el misterio. Le pregunté por el famoso túnel...


-Puede que exista algo entre la Iglesia y El Obraje, bajo uno de los confesionarios el piso tenía una resonancia hueca. Sobre el otro túnel…

Más tarde, los arqueólogos confirmaron la existencia de un muro subterráneo, paralelo al del tajamar. Ambos conforman la unidad estructural del dique y quizás parte de esas piedras fueran visibles en el pasado, estimulando la imaginación con pasadizos derrumbados sobre tesoros religiosos perdidos…


-… yo se dónde hay rastros de un arco como estos pero prefiero guardar silencio. No quisiera que se destruya lo poco que queda. La gente no respeta nada, ya ves lo que hicieron con las hornillas.


Se llevó el secreto a otra Altaria. Sospecho, que los arados deben estar sembrando una vana riqueza genética, sobre los cimientos de esta leyenda.
.

Comments (5)

Walt: Me hiciste viajar en el tiempo y en dos frases me hiciste hablar con ese Señor del que hablás.
A pesar de los 10 años que estuve en Córdoba, solamente fui una vez a Alta(G)r(ac)ia. Me gustó, me hizo acordar a Jujuy...
Quisiera poder pintar historias de la manera en que lo hacés. Con esa magia; con esos vuelos a cualquier tiempo. Lo que admiro de vos y del nene es la capacidad de transmitir sensaciones, de hacerme sentir lo que sienten ustedes.
Abrazo a la distancia Walt.

Hola Walter,desde ya te agradezco mucho la deferencia que tuviste al mandarme tu Blog, que me pareció maravilloso.
El mismo demuestra tu sensibilidad hacia las cosas que fueron....y seguirán siendo importantes para el futuro de nuestras generaciones.
Me permití adjuntarte algo, que me tocó profundamente y que pude servir para afianzar aun más tu don de gente.
Otro Gran Abrazo,
Juan

Mauri: Verte por acá siempre me reconforta.
Don Justo Torres fue nuestro Indiana Jones vernáculo, sin formación académica pero con un profundo amor por la historia trabajó para el Museo del Virrey poniendo sus músculos para hundir la pala y desenterrar increíbles tesoros.
Cuando me convocaron para restaurar la maqueta de la Estancia Jesuítica tuve la oportunidad de conocerlo en una visita que él hizo pues a pesar de estar jubilado y enfermo siempre regresaba al museo al que consideraba su otro hogar. Lamento mucho no haber podido disfrutar más de su compañía.
¿Sabés qué? el Nene también encontró en el paisaje altagraciense cierto parecido con Jujuy.

Juan: Me permití publicar el mail que me enviaste luego del desencuentro con las postales, que al final para mi, concluyó en un buen encuentro.

Hola Walter, me encanta tu blog Altariano, lo he ojeado brevemente pero es muy especial para mí el reencuentro con tus bellas postales, tus anécdotas, las historias de los lugares, las leyendas......me mató lo del túnel a Córdoba y todo ese misterio popular....Un abrazo grande. Marcelo.

Marcelo: Quién sabe cuántos túneles socavan la materia y el alma de los altagracienses! (subterráneas historias conectan las sombras del deseo, el poder, el amor y el fracaso).